Se acerca una ola de frío polar y en las zonas en las que las temperaturas bajan bastante en invierno, es probable que se produzca congelación de tuberías, sobre todo las que se encuentran en el exterior, y especialmente en las viviendas que tienen poco uso.
Para evitar la congelación de tuberías, es necesario seguir unas sencillas pautas que a largo plazo pueden resultar una ventaja significativa para tu bolsillo y tu tranquilidad, ya que si las tuberías se congelan lo único que conseguirás son gastos extras.
Si tienes una vivienda en la montaña y no la visitas a menudo, tienes que ser especialmente prudente con este tema. Creemos que no pasará nada porque las tuberías se congelen mientras que no está habitada, pero no es así. Cuando el agua se congela en el interior de las tuberías, se expande y produce grietas incluso roturas que cuando vuelvan a su estado normal, serán la causa de fugas de agua. Y te encontrarás alguna inundación que otra.
Cómo evitar la congelación de tuberías
Si vives en una zona muy fría es normal tener tuberías congeladas durante el invierno. Siguiendo unas sencillas pautas puedes evitarlo o al menos que los daños sean leves y te te suponga un gastos exagerado además de un dolor de cabeza.
5 sencillos consejos para evitar la congelación de tuberías
- Si a menudo la prevención puede ser un gran aliado, en este caso mucho más. En muchas zonas de nuestro país los inviernos suelen ser bastante duros, a pesar de que el clima se va suavizando, y es por esto que empezar a prepararse con tiempo para esta estación te permitirá afrontar mejor las diferentes situaciones que pueden presentarse y así podrás estar seguro del buen estado de tus tuberías y de la protección que tienen.
- Si vas a pasar un tiempo prolongado sin visitar la casa, y sin abrir los grifos, es recomendable que cierres la llave de paso y vacíes el sistema ya que, cuanta menos cantidad de agua haya dentro de la tubería menor será la posibilidad de congelación, y menor el desastre en caso de rotura.
- Es muy importante utilizar un material aislante para revestir las tuberías exteriores, ya que te ayudará a proteger las tuberías del frío. Existen distintos tipos de cintas térmicas y accesorios aislantes que te pueden servir y además la inversión económica es muy pequeña en comparación con el beneficio que obtendrás. Eso si, para su instalación sigue siempre las indicaciones del fabricante.
- Si tienes una manguera en el exterior de la casa, jardín, azotea o patio, es primordial que las desconectes y que vacíes el agua que puedan tener en el interior, para evitar que se rajen con el hielo o que la congelación llegue hasta la llave.
- Por último, existen modelos de caldera que disponen de un termostato de protección contra heladas que se activa automáticamente cuando detecta una caída grande de la temperatura, solucionando el problema cómodamente. Pero si tu caldera no tienen ese sistema, es fácil solucionarlo, solo tienes que dejar el termostato a no menos de 12 grados mientras no te encuentres en la vivienda. El gasto será mínimo comparado con el problema que evitas
¿Qué hacer si las tuberías ya se han congelado?
Pero si a pesar de todas las precauciones tomadas las tuberías se han congelado, no te alarmes. Sigue estas indicaciones:
- Lo primero que debes hacer es descubrir cuál es el tramo afectado. Para esto te recomendamos que abras los grifos uno a uno para detectar por el que no sale agua con normalidad, ese será el tramo que se ha congelado.
- Luego tienes que descongelar el agua estancada. Si la tubería está visible, puedes utilizar un calentador eléctrico o un secador de pelo que suelen tener una buena potencia para lograr el objetivo que queremos. Pero no dejes de vigilar la descongelación y tener extremo cuidado con los materiales existentes en la zona afectada, ya que se puede provocar un pequeño incendio.
- Y por último, si una vez descongelada ves claramente alguna rotura en la tubería, nuestra recomendación es que avises a un fontanero profesional para que realice la reparación o sustitución con los materiales y métodos adecuados. La mayoría de las veces las reparaciones «domésticas» se complican y acaban siendo un problema mayor.
Si sigues estos sencillos consejos, la congelación de tuberías no será un problema para ti.